Cuando eleves tus alas para iniciar aquella ilusión que amas, no te derrumbes si encuentras a personas que no te dejarán elevar para alcanzar tu sueño.
Habrá ocasiones que intentarán retenerte para que no llegues a alcanzar tus anhelos.
Eres el único que decide hasta donde quieres llegar, la actitud que tomes en esos momentos determinarán la altitud que vayas a alcanzar.
Forja tu virtud con lo mejor de la juventud, más si te aferras a lo que deseas, tu vuelo será elevado, aliméntate de aquellos sueños alcanzados, llénate de mil experiencias y transfórmate en ellas, en lo maravilloso de tener y de creer en tu ser, no tengas miedo a volar porque siempre va a haber personas con tu mismo ideal que te acompañarán al final.
Vive día a día, comprendiendo que sólo va haber esa alegría, lo demás será lo que tú decidas, sólo vive, y cuando te eleves recuerda lo grande que eres.
Mas los que esperan á Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán las alas como águilas, correrán, y no se cansarán, caminarán, y no se fatigarán. Isaías 40:31.